sábado, 23 de enero de 2016

El discípulo se acercó al maestro. Era el atardecer. El sol era una bola roja que se hundía en el horizonte. Era la hora de la calma, de la introspección, y el maestro estaba embuido en su meditación. Igual escuchó llegar al discípulo. Adelantándose a este le preguntó: "Que es lo que dispersa tu energía?"
El discípulo se sentó frente a su maestro y habló:
"He escuchado sus enseñanzas, leídos todos sus escritos y todos los libros que me ha dado a leer. He realizado todas las practicas, todos los ejercicios y sin embargo aún no siento la conexión. No hallo ese vinculo con el universo y no puedo despegar de todo lo que me rodea, aún me siento anclado. No siento que me eleve y no encuentro nada de todo lo que me dice."
El maestro lo miró y recordó que mucho; pero mucho tiempo atrás; él habia estado en esa misma situación, igual que todos los discípulos de todos los maestros. Todos pasan por lo mismo. Se sonrió, mas para si mismo que sonreír a quien tenia frente suyo.
"Amado hijo" dijo el maestro luego de un par de minutos.
"Nada llega antes de su hora correcta. No se cocina el pan en un segundo, sino que lleva todo el tiempo necesario para que la masa que se formado al mezclar ciertos elementos, logre el punto justo para ser considerado un pan."
"Todo tiene su tiempo, aunque el tiempo sea irrelevante, aunque no tenga valor. Pero es necesario darle ese tiempo, ese instante en tu eternidad. Debes dar lugar a que todas las dudas, todos tus conflictos, todas tus miserias, todos tus anclajes en lo terrenal, todos tus pensamientos basados en el ego, todas tus preocupaciones por ti mismo, por tu persona, por tu cuerpo, por tus afectos. Cuando todas tus cosas afloren en la superficie, recién podrás tomar un cuenco y extraerlas, una a una. Tu parte material debe disgregarse, pulverizarse y ser simplemente tu vestimenta en este espacio y tiempo de este plano en el cual nos encontramos tu y yo. Tu Ser Eterno debe ocupar todos tus espacios y pensamientos. Tu desarrollo llega cuando tu vida encarnada esta regida por tu espíritu. Cuando dejas los dolores de la carne, cuando tu ego se disuelve, cuando tu mente solo obra en amor hacia los demás, cuando tu corazón ama de verdad. Es allí, en ese momento, cuando tienes la primera muerte y el primer renacer. Exteriormente no cambias nada, los demás te siguen viendo como antes. Tú te ves diferentes, te sientes diferente. Pocos veremos como has cambiado. Y es allí cuando tu verdadero camino comienza, cuando tiene sentido tu encarnación y cuando comienza tu misión y tu razón de estar encarnado."
"A muchas personas les lleva muchísimas encarnaciones lograr ese punto de la primera muerte. Le llamamos así porque es la transformación que logras como ser encarnado. La segunda muerte es cuando llegas al punto de no necesitar encarnar para tu evolución y si lo haces vienes por una misión
importante o como maestro."            
"Has dado el paso de exponer tus dudas, estas llevando todo a la superficie, aunque no lo veas o no lo sientas estas en camino. No pidas lograr todo en un instante, ni en una sola vida. Tienes la eternidad o sea que un tiempo infinito para lograr tus evoluciones. Es un camino ascendente, como subir una escalera, siempre mira hacia arriba y no hacia abajo, si te concentras en cuantos escalones subiste, en lo alto que estas, solo estas viendo tu orgullo, es tu ego que te sostiene la mirada hacia abajo. Mira hacia arriba, veras cuantos escalones aún te faltan. Mirar hacia arriba implica la humildad, de decirte que estas en el primer escalón y que debes iniciar la ascensión. Cada vez que te detengas en un escalón estarás en el primer escalón de la escalera que aún debes subir. De nada vale ufanarse de cuantos subiste pues eso no hará que subas mágicamente los demás."
"Deja de buscar los modos y las maneras, las palabras de los demás son simplemente guías, consejos, experiencias de otros que solo sirven como referencias. El sendero evolutivo está dentro de uno, y es distinto para cada ser. Uno debe abrir ese sendero, lo hace cada día a cada paso. No busques, mira dentro de ti, déjate llevar por tu esencia, por tu energía. Y si no la ves, o no la sientes, simplemente déjate llevar, abandónate y en un momento te llegará una luz, tu luz y sera quien te guíe. Porque solo tú puedes guiarte a ti mismo. Nosotros los supuestos maestros solo estamos en un momento, una etapa, todo lo demás lo haces tú"

     

2 comentarios:

  1. "Mirar hacia arriba implica la humildad, de decirte que estas en el primer escalón y que debes iniciar la ascensión. Cada vez que te detengas en un escalón estarás en el primer escalón de la escalera que aún debes subir. De nada vale ufanarse de cuantos subiste pues eso no hará que subas mágicamente los demás." esto es sabiduría..

    ResponderEliminar
  2. Me he leido todo el texto de un tirán y me ha encantado, me ha dado motivos para reflexionar,
    Gracias
    Saludos

    ResponderEliminar